Comunicación asertiva

Comunicación asertiva

Comunicación basada en el respeto propio (valores y creencias) y que a la vez se genera en el respeto hacia los demás. Aprender a decir “No” sin caer en la agresión o en la vacilación respecto a eso que realmente deseamos.

Al aceptar eso que somos, y caminamos por la vida respetando aquello, vamos generando y potenciando nuestra autoestima.

Técnicas de comunicación asertiva

1. Disco rayado: Firmeza.

Mantenernos firmes ante la manipulación y la disuasión. Comunicando en una frase corta aquello que realmente deseamos. Por lo general el aprender a decir no es la base de eso que responderemos: “No, gracias”; “No, gracias tengo planes”. Sin agobio, sin ser agresivo, sin culpa o ansiedades, sin sentir la necesidad de justificarnos, solo comunicando aquello que deseamos de manera suelta espontánea y con una sonrisa que sea el reflejo de eso que sentimos.

La transmisión de nuestra decisión también puede ser comunicada bajo los mismos parámetros con una afirmación de eso que hemos decidido, por ejemplo: “He decidido salir al cine solo hoy porque tuve el deseo de hacerlo”.

Quizás insistirán y trataran de manipular para que cámbienos de opinión pero la firmeza es crucial: y volverás a reforzar tu decisión: “la próxima vez iremos juntos, ahora deseo ir solo”

2. Sándwich: Critica.

Expresar una crítica nos pone nervioso, no sabemos cómo expresar algo que no nos gusta.

-Comenzamos con una valoración (primera rebanada del pan): eres muy importante para mí, sé que soy importante para ti, sé que me quieres, valoro tus opiniones y tus puntos.

-Seguimos con la crítica (el jamón): me gustaría decirte que no me sentí a gusto con la manera que me hablaste en la mesa delante de tus padres, te pediría que no se repitiera.

-Rematamos con valoración (segunda rebanada de pan): Tengo presente que eres una persona respetuosa y que me tiene en alta estima…

3. Preguntas concretas.

Cuando te critican: tenemos derechos, a no responder a la criticas, sin ponernos a la defensiva, no entrar en el juego de valorar lo dicho, sino que actuaremos por medio de la pregunta asertiva.

-¿A qué te refieres con esto que has dicho?

-¿Qué es lo que no te ha gustado concretamente?

-¿Qué es lo que más te molesta de mí en esta situación?

-¿Cómo puedo evitar que esto se volviera a repetir?

-¿Me explicas que hay de negativo en esto que ha sucedido?

A través de la pregunta obtendremos más información sobre lo acontecido, evitando así la confrontación, de esta manera la otra persona se sentirá escuchada y valorada. Bajará la defensa que tenemos ante las críticas, evitando el juicio y ampliando nuestro espacio de observación.

4. Autorevelaciones (propia)

Cuando no hay confianza con las personas y no hay tema. Dando pequeñas revelaciones de uno mismo, dando información personal, generando cercanía y trabajando la confianza de manera que la otra persona se sienta invitada a participar en la conversación.

-Última película o libro que has visto/leído.

-Alguna anécdota del día.

-Algún pasatiempo.

-Algo más de ti que permita al que está enfrente conocerte un poco más.

Nota: Practica estas técnicas en tu cotidianidad y observa si te son útiles, de ser así, integrarlas a la manera de relacionarte con tu entorno.